7. Redada
Tras inspeccionar de manera más o menos discreta el local, haciéndose pasar por una cliente con pocas ganas de socializar pero muchas de curiosear, Selena por fin descubrió un pasillo secreto. Pronto descubrió que aquello estaba protegido por sensores láser y un campo de fuerza, demasiada seguridad para nada bueno. De alguna manera consiguió acceder a los controles para debilitar el campo, se cargó el acceso a la puerta e hizo saltar la alarma. Allí pilló a un hombre in fraganti, rodeado de droga e implantes del mercado negro, contando dinero. Le apuntó con la pistola, pero alguien por detrás hizo lo propio. Selena se revolvió golpeando al hombre de atrás con el que comenzó un forcejeo, momento en el que el hombre que estaba dentro, que parecía el jefe, aprovechó para escapar jurando vengarse... Por de pronto, su negocio parecía haber sufrido un duro revés.